"La borrasca Leire no fue precisamente un fenómeno atmosférico, fue un fenómeno humano"
Viene el día cargadísimo de noticias. Debe ser por la Borrasca Claudia. Y ojo, que a mí me gustan los nombres de mujer para las borrascas, ojo, lo digo sin ánimo de ofender al ministerio de igualdad, es en términos puramente literarios, ya sabes, el mito de la mujer fatal, de la amante tormentosa que ha dado grandes poemas románticos, y películas fascinantes. El problema es cuando lo aplicas ese mito a la picaresca nacional, y aparece una señora con cara de Carlos Latre, que se cree una espía de lucha contra el fascismo y no llega a Matahari comprada en los chinos. Estoy hablando, claro, de la célebre fontanera del PSOE, y por eso, cuando pase Claudia, podríamos bautizar a la próxima borrasca con el nombre de borrasca Leire.Ahora bien, a diferencia de la borrasca Claudia, de la cual nadie es responsable político ni jurídico, la borrasca Leire no fue precisamente un fenómeno atmosférico, natural. Fue un fenómeno humano, demasiado humano. Una operación turbia, ...